Día Internacional de la Educación y los efectos del COVID-19 sobre este sector, clave para el cumplimiento de los ODS
26 enero 2021
- Como clama todo el planeta, Guinea Ecuatorial se encuentra ante la difícil situación planteada en un escenario que exige máxima resiliencia: perseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en Educación frente a los efectos devastadores del COVID-19, que obliga a cerrar los centros de formación empeorando el logro de los ODS en todos los campos y comprometiendo el futuro de las generaciones venideras.
La comunidad internacional celebra el 24 de enero el Día Internacional de la Educación, proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, en recuerdo al papel preponderante que juega la educación para el logro de la paz, la eliminación de la pobreza, la igualdad de género, los derechos humanos y, en general, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Lema del presente año 2020: “Recuperar y revitalizar la educación para la generación COVID-19”
La conmemoración de este año tiene por lema “Recuperar y revitalizar la educación para la generación COVID-19”, teniendo como telón de fondo el COVID-19 y sus efectos devastadores sobre la educación, entre otros. Es por ello que el Secretario General, António Guterres, hace especial hincapié en su mensaje, al destacar que “cuando la educación se interrumpe, todo el mundo se ve afectado, en especial los estudiantes, los docentes y las familias”.
António Guterres asegura que la educación es la base para ampliar las oportunidades, transformar las economías, combatir la intolerancia, proteger nuestro planeta y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. En un momento en que el mundo sigue luchando contra la pandemia, la educación, como derecho fundamental y bien público mundial, debe protegerse para evitar una catástrofe generacional.
António Guterres, Secretario General de la ONU: “cuando la educación se interrumpe, todo el mundo se ve afectado, en especial los estudiantes, los docentes y las familias”
Según la UNESCO, institución especializada de las Naciones Unidas para la Educación y la Ciencia, en la actualidad, 262 millones de niños y jóvenes siguen sin estar escolarizados, 617 millones de niños y adolescentes no pueden leer ni manejan los rudimentos del cálculo; menos del 40 por ciento de las niñas del África Subsahariana completan los estudios de secundaria y unos 4 millones de niños y jóvenes refugiados no pueden asistir a la escuela.
Es por ello que su Directora General, Audrey Azoulay, ha señalado en su mensaje que, en el pico de la pandemia, las escuelas llegaron incluso a estar cerradas para el 91% de los educandos. Con ello, todo el mundo pudo constatar que la educación era un bien público mundial; que la escuela no solo era un lugar de aprendizaje, sino también un lugar de bienestar, protección, nutrición y emancipación; e invita a promover la educación como un derecho fundamental y como el instrumento más poderoso para el desarrollo. Porque, aseguró, “defender el futuro de este derecho es defender el derecho al futuro.”
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) estima que la capacidad de los niños de leer, escribir y realizar operaciones matemáticas básicas se ha deteriorado, y las habilidades que necesitan para salir adelante en la economía del siglo XXI han disminuido. Su salud, su desarrollo, su seguridad y su bienestar están en peligro y los niños más vulnerables sufrirán las peores consecuencias.
En declaraciones recientes, la Directora Ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore, estima que no se deben escatimar esfuerzos para mantener las escuelas abiertas o para darles prioridad en los planes de reapertura.
Henrietta Fore recomienda que, en caso de desconfinamiento, las escuelas sean los primeros centros en reabrir, porque si los niños tienen que afrontar otro año sin escuela, los efectos seguirán haciendo estragos en las próximas generaciones.
Henrietta Fore, Directora Ejecutiva de UNICEF: "en caso de desconfinamiento, las escuelas deben ser los primeros centros en reabrir, porque si los niños tienen que afrontar otro año sin escuela, los efectos seguirán haciendo estragos en las próximas generaciones".
Las agencias de las Naciones Unidas en Guinea Ecuatorial, en este sentido, vienen trabajando estrechamente con el Gobierno para mitigar los efectos del COVID-19 en la educación. Se montaron campañas de sensibilización en las escuelas y, para reducir el efecto del cierre de las escuelas, se ha apoyado el programa “Escuela en Mi Casa”, entre otras iniciativas.
Virgilio Ela Motu
Antes de unirse a RCO ejerció como locutor, redactor y reportero en la Radio Exterior de España y la Agencia Efe(Madrid-España), Oficial de Información del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (2001-2010); Director General de Radio Televisión GE y asesor técnico independiente del ministro de Información, Prensa y Radio; presidente del Subcomité Técnico de sensibilización, del Proyecto Nacional de Transición a la Televisión Digital Terrestre (TDT); consultor, autor y ponente de varios cursos de formación para jóvenes periodistas y otros; creador de espacios en radio y televisión, etc.
En RCO ejerce el papel de coordinador de las estrategias de comunicación destinadas a reforzar el liderazgo y mejorar la percepción de la imagen y actividades de Naciones Unidas en el país. Coordina el Grupo de Compunciones de las Naciones Unidas (UNCG). Crea y gestiona los medios de comunicación propios (sitio web, redes sociales, News Letter, etc) y garantiza la buena relación con los externos.